lunes, 3 de noviembre de 2008

Atsuto Uchida: Esperanza nipona


El mundo del futbol se va fijando cada vez más en el paisaje africano, y no deberíamos dejar a un lado a los futbolistas asiáticos. No poseen el físico negro, pero si el toque amarillo. Uno de estos chicos que merecen jugar en Europa es Atsuto Uchida, toda una sensación en la Liga Japonesa co solamente 20 primaveras.


Juega de carrilero derecho en el Kashima Antlers y desde principios de año lo hace en la selección nipona, como titular. También estuvo en los Juegos Olímpicos, dejando una buena impresión.


Es un hombre muy ofensivo, de los carrileros de antes, con gran precisión en pases y centros y un gran físico. Es muy trabajador, lucha todo y tiene gran resistencia. El fallo lo tiene a la hora de defender pero nada que no se pueda mejorar. También a jugado a pierna cambiada algunas ocasiones, y también de interior derecho, puesto a que tiene muy 7buen regate y uno contra uno, aparte de olfato goleador.


Además, tiene en su poder todos los récords de precocidad: con su club (primer gol y primer debut), con la selección, y en la J-League japonesa.


Antes de llegar al Kashima Antlers pasó por lamisma escuela de futbol de Hidetoshi Nakata y Shunsuke Nakamura, y en Japon estan seguros de que llegara tan lejos omás que ellos, debido a su gran potencial.


Los últimos rumoreslo situan en la órbita del Dinamo Kiev,PSV, Hoffenheim o Ajax. El precio no serí muy elevado, 2 o 3 millones como mucho, puesto que en Japón dejan salir a sus estrellas para que den a conocer su liga en el extranjero.

3 comentarios:

Asier dijo...

Buen jugador este, lo vi en unos videos en youtube y parece que tiene potencial.
Interesantísimo.

Caballerosinespada dijo...

Estoy de acuerdo tio. Mas amarillos y menos negros. Aún con riesgo de que parezca un comentario raciasta creo que debería potenciarse mas el futbol asiatico porque tiene una elegancia y estilo de la que el futbol africano carece.

Adiranov dijo...

Yo también lo descubri en youtube, pero también en los juegos olímpicos. Tiene gran futuro